1) Cruzarse con un gato negro.
Provocaría todavía peor suerte cruzarse con un gato azul en las inmediaciones de Chernobyl. Cruzarse con un oso, independientemente del color, tampoco es muy recomendable.
2) Romper un espejo.
Puedes cortarte con los trozos e, incluso, dejar de comprobar si te sobra rímel. La duda es: ¿por qué precisamente 7 años de mala suerte? ¿Por qué no 6 años y 3 meses?
3) Derramar sal.
La mala suerte está en el acto que sigue a la superstición: echar sal por encima del hombro. Nuestro vecino de restaurante puede manifestar su opinión respecto al gesto.
4) Pasar por debajo de una escalera.
La superstición se multiplica si encima se encuentra un pintor obeso, o dos de constitución robusta, con cuatro latas de pintura y ronda la tuneladora del Ave en las proximidades.
5) El martes y 13.
Pero es como la siesta, solo se lleva en España.
Los científicos de la supersticiología se siguen preguntando hoy día: ¿si viajas a Perpiñán, pasas un martes fantástico?
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1 comentario:
encontré lo de mi tarea XD
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